Desordenes de la conducta y repercusión en los/as menores
El trastorno de la conducta es una alteración del comportamiento que suele presentar sus primeros síntomas en la infancia. Se caracterizada por un comportamiento antisocial que viola las normas y reglas adecuadas para la edad del menor.
Los desórdenes de la conducta constituyen un grupo complicado de problemas emocionales y del control de los impulsos incluyendo un patrón de conductas hostil y/o agresivo que persiste en el tiempo.
Es cierto que la mayoría de los niños/as en ocasiones se comportan de manera inadecuada por diversos motivos que exteriorizan a través de la ira o el enfado (estrés, deseos, nacimiento de un hermano/a, divorcio o la muerte de un miembro de la familia, etc.) Los trastornos de la conducta son más serios. La frecuencia con la que realizan este tipo de conductas indeseadas determinara si se trata de un trastorno en la conducta o una llamada de atención puntual. Por ello, es necesario que las familias y educadores presten atención a los síntomas que puedan presentar, en vez de etiquetarlos simplemente con calificativos como malo, travieso o desastre.
Los niños y niñas con problemas de conducta suelen tener problemas en el aprendizaje y bajo rendimiento académico. Con frecuencia, el niño o niña destacará en clase por su conducta alborotadora y desafiante y por no admitir reglas. La educación de los niños y niñas con trastornos de conducta es más eficaz cuando se centra en lo que realmente hacen y en las condiciones ambientales en donde se realizan las conductas.
Las causas de los trastornos de conducta se clasifican en: psicológicas y fisiológicas.
-Los factores psicológicos se refieren a la relación de los niños y de las niñas con su familia, ejerciendo una gran influencia en las diferentes formas en que el niño o niña aprende a actuar, en particular durante los primeros años de vida del niño/a.
-Los factores fisiológicos nos remiten a la creencia de algunas investigaciones acerca de que todos los niños y niñas nacen con un temperamento determinado biológicamente, aunque el temperamento innato del niño o de la niña posiblemente no cause por sí mismo o sí misma el problema de conducta.
Los trastornos de conducta pueden darse en: rabietas, desobediencias y agresividad.
Rabietas. Es la forma más leve de alteración de conducta en los niños y niñas y, en la mayoría de los casos, se trata de episodios de carácter esporádico, no muy intensos y a los que cabe considerar como normales.
Se manifiestan mediante llantos y protestas verbales, agresión física hacia objetos o hacia otras personas e incluso hacia sí mismos o sí mismas. Se puede afirmar que la rabieta es un llanto violento que el niño o niña usa para conseguir sus deseos por encima de las reglas y normas establecidas por los adultos. Si cuando llora consigue todo lo que quiere, entonces convertirá cada situación en una rabieta para conseguir sus objetivos.
¡Hay que estar atentos y no dejarse tiranizar por las rabietas!
Desobediencias. Se considera una conducta desobediente aquella en la que el niño o niña no atiende, continuada y consistentemente, a las órdenes razonables de sus padres, maestros o maestras y cuidadores o cuidadoras, rechazando la autoridad de éstos y éstas y generando problemas de convivencia. Esta conducta se suele iniciar a los dos años. La mayor razón de la desobediencia la encontramos en el hecho de que los niños o niñas pretenden imponer su voluntad frente a la del adulto, especialmente cuando éste le limita y le impide realizar ciertos deseos y pretensiones.
Agresividad. La agresividad implica el acto o la intención de hacer daño físico y/o psicológico a otra persona. Este daño puede alcanzar distintos niveles de intensidad. La agresión física implica violencia corporal hacia la otra persona; la verbal, la expresión de insultos o palabras ofensivas para el agredido. La agresión psicológica crea temores, inseguridad, pérdida de autoestima y hace daño al otro sin tocarle.
Signos de alarma:
👉 Agresión a personas o animales
👉Destrucción de la propiedad
👉Engaño o robo
👉Incumplimiento grave de las normas
👉Falta de remordimiento o culpabilidad
👉Insensible, carente de empatía
👉Despreocupado por su rendimiento
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